Cuidar el pelaje de tu perro, al igual que cuidar del nuestro, necesita un cuidado especial. Esto no se debe a una simple cuestión estética, ya que mantenerlo limpio y saludable es de vital importancia para su bienestar general. Está claro que es algo que les protege de los factores externos, pero también refleja su estado físico. Por eso, no se trata de saber cual es el mejor cepillo o el mejor champú, sino de conocer todos los aspectos que influyen y que hay que tener en cuenta en el cuidado de nuestro canino.
Conoce el tipo de pelaje de tu perro
En el mundo de nuestras mascotas, existen cuatro tipos de pelaje: rizado, duro, corto, largo y doble capa. Cada uno posee sus propias características:
Pelo corto: Este peaje es suave y no tiene un mantenimiento extenso. Estos perros son fáciles de cepillar debido a su pelo suelto.
Pelo rizado: Este es el pelaje más complicado, ya que, tiende a enredarse y formar nudos, lo que requiere un cuidado más detallado con productos especializados. es necesario recortarlo debido a que tiene una alta tasa de crecimiento.
Pelo largo: Este es sedoso y abundante en general. Tiene un reciclaje continuo, por lo que se cae con mayor frecuencia. Lo recomendable con estos perros es realizarles una limpieza una vez al mes.
Pelo de doble capa: Este pelo es grueso y denso y tiene una capa interior suave y una externa que lo protege. Un ejemplo de estos son los Huskies o los Pastores Alemanes. Requiere un cepillado regular para mantenerlo en buen estado.
Pelo duro: Para mantener este pelo sano y brilloso es necesario hacer uso de champús especiales para este tipo de pelo. Para recortarlos es necesario utilizar máquinas eléctricas.
Cómo bañar a tu perro de manera adecuada
La frecuencia de baño de nuestro perro es algo muy relativo y depende directamente del perro. Lo recomendable es hacerlo cada tres semanas, pero sin dejarlo pasar más de dos meses.
Los de pelo largo necesitan un baño con mayor frecuencia que los de pelo corto.
Lo más importante es bañarlo con el champú ideal para él. Tanto porque le dará el cuidado que necesita, como porque le dará el mejor aspecto posible.
Lo primero que hay que hacer es preparar el baño, es decir, que el agua este a la temperatura adecuada, ni muy fría ni muy caliente.
Seguidamente hay que mojar al perro desde el cuello hasta abajo, sin que el agua le entre en los ojos. La cara y cabeza se puede limpiar con un paño. En esta parte se aplica el champú y/o acondicionador.
Por último, hay que secarlo bien con una toalla lo suficientemente grande. Incluso e algunos casos se puede hacer uso de un secadores de pelo, pero solo si su perro lo tolera.
Además, es una buena opción aplicar una colonia para perros especial para mantener durante bastante tiempo el buen aroma de tu mascota. Aparte de la reducción de reacciones alérgicas y prevención de problemas dermatológicos que esta produce.
Champús para perros
Elegir el champú adecuado es crucial para la salud de nuestro peludo. Por eso aquí te vamos a dejar uno de los champús para perros más recomendados que podrás encontrar en nuestra web. Tienes que asegurarte de que estos productos contengan la menor cantidad de ingredientes perjudiciales o peligrosos para tu mascota.
Acondicionadores para perros
El uso de acondicionadores especiales no es algo de vital importancia como es el caso del champú, pero si que es 100% recomendable a la hora de mantener el pelo suave, desenredado y fácil de peinar.
Consejos adicionales sobre cómo cuidar el pelaje de tu perro
Más allá del cepillado o lavado, cuidar de la higiene de nuestro perro y de la de su pelaje es una rutina que tenemos que incorporar a nuestro día a día. Esta es una forma directa de evitar infecciones y enfermedades.
Por eso es necesario limpiar las patas, la cola y el hocico de manera regular, ya sea con toallitas o con una esponja mojada. También, es imprescindible proteger los oídos de nuestras mascotas de posibles infecciones y agentes externos.
Aparte de estas zonas, la higiene ocular de nuestra mascota, es un aspecto que hay que tener en cuenta. Se debe limpiar los ojos recurrentemente con un algodón húmedo. Esta labor nos evitará infecciones oculares o malestares.
Por último, un detalle que nos lo agradecerán nuestras mascotas es el de aplicarles un spray repelente a los ataques de insectos y parásitos externos. De esta forma se pueden evitar picaduras de garrapatas piojos o pulgas.
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